Made in Lanús: ¿quedarse o irse?

Con gran éxito continúa presentándose en Buenos Aires, Made in Lanús, el clásico argentino que emocionó a todo el país, protagonizada por Alberto Ajaka, Cecilia Dopazo, Esteban Meloni y Malena Solda, esta vez con dirección de Luis Brandoni.

En algún almuerzo familiar, en alguna juntada con amigos, en cierta reunión de bar, puede que hayan escuchado el debate eterno entre si irse o quedarse en la Argentina. Pasan los tiempos, los años, los gobiernos, y ese discurso sigue ahí, como si nada hubiera pasado. ¿Es mejor irse a probar suerte? ¿En otros países se encontrará la suerte que acá no pudiste tener? ¿Por más que se haga esfuerzo, no importa porque estamos condenados?
Y del otro lado… Si te vas en realidad allá vas a ser un «sudaca». Lo importante es quedarse acá y lucharla, remarla, ser fiel a tus raíces. Allá no sos nadie, acá sos «El negro».
Un poco a modo de resumen, esas son las visiones contrapuestas de la obra, donde la Yoli de Lanús, intentará convencer a su cuñada cheta que se fue a vivir a «Norteamérica» con su familia, de las ventajas de quedarse en el país. En el medio, una escenografía que evoca una casa de provincia de otra época, con un póster de Lanús, un lavarropas roto, el equipo de mate (siempre presente)… Y algunos agregados, como cocinar una salsa en el medio de la obra y que llegue el olor al público, o un pajarito cantando mientras los actores recitan sus diálogos. Todo genera una nostalgia, emoción y un preguntarse, ¿quién tendrá razón?
Estas temáticas tienen su contexto en una obra de la época de la posdictadura, con quejas tan recurrentes de los que se fueron, de los que no se fueron y de aquellos que quisieron irse pero no pudieron. Una obra para emocionarse, reflexionar, y dejarse conmover por cada argumento de estos protagonistas que muy metidos en su papel, nos hacen tomar partido para un lado o para el otro.

Acerca de la obra
«Made in Lanús» es una verdadera pieza maestra de Nelly Fernández Tiscornia, que continúa con una vigencia única y es muy necesaria para reflexionar en estos tiempos.  Se estrenó por primera vez el 1 de enero de 1986, con Marta Bianchi, Leonor Manso y Patricio Contreras bajo dirección de Jorge Palaz. Tal fue la repercusión, que un año después salió la película, y hoy, a casi 30 años de ese estreno, sigue siendo interpretada.

SINOPSIS
Mabel y Osvaldo, una pareja de argentinos que viven en Norteamérica, regresan luego de 10 años a su país para concurrir al casamiento de un familiar. Allí se reencontrarán con La Yoli y El Negro (hermano de Mabel), un matrimonio de clase media, que a pesar de las reiteradas crisis económicas, sobreviven como pueden, en la populosa ciudad de Lanús, del conurbano bonaerense. Durante el encuentro, Mabel y su hermano develan una sorpresa. Momentos entrañables, cargados de nostalgia y afecto, cuentan una historia en donde cada personaje tomará una postura distinta y absolutamente visceral que describe una problemática siempre presente en nuestro país.