
Esta ciudad porteña no huele a hallacas, pan de jamón, patacones, y ron como Maracaibo, pero las gaitas que me susurran a los oídos a través de mi MP3 me transmiten ese alegre sentimiento de las fiestas que invade las calles Venezolanas en ésta época.
Así mismo, por estos rumbos, los adornos navideños son escasos, por lo que he decidido compartir con ustedes algunaspequeñas muestrasde las calles de Maracaibo, a través de esta foto que me envió el venezolano Antonio Cuauro.
Foto Antonio Cuauro